El Mandamiento del Amor
- Sebastián Reyes
- 19 abr 2024
- 2 Min. de lectura

El Mandamiento del Amor (acrílico sobre madera, 60x80cm).
Les recomiendo saltarse la experiencia de asistir a una escuela católica.
Muchos de ustedes lamentablemente habrán tenido el infortunio de que su educación fuera impartida por la maquiavélica institución que es la iglesia, nada personal con Dios, pero creo que muchos podremos dar fe que su staff aquí abajo no debería estar a cargo de impartir el conocimiento.
Se que es una gran generalización, pero los años de fe impuesta, revisionismo histórico, clases de biología tamizadas por puritanismo, hipocresia y un ambiente más agresivo que pasivo, en mi humilde opinión son más que suficiente para justificar mi sentir.
Si bien no habré aprendido nada sobre pensamiento crítico o cómo evitar las ETS, sí aprendí bastante sobre jerarquía angelical y cómo una disculpa de el Papá Juan Pablo es capaz de borrar la inquisision, aún cuando la persecución y genocidio a grupos que no se ajustan al canon (de cualquier religión, pero especialmente católico) es más que vigente a día de hoy. Uno esperaría un poco más de empatía o mínimo vergüenza de la pandilla que inició siendo la victima solo para terminar siendo el victimario
En fin la hipotenusa. Y en nombre sea de dios supongo.
Volviendo a lo que aprendí, y supongo que no fue algo nuevo, pero sí bastante disonante, fue el hecho de que esta fe en al que nací sin lección y en la que crecí, a pesar de sus evidentes fallos y claros subtonos vilentos, esta fundada sobre "amor".
El mandamiento del amor es, según se me explicó en clase, un mandamiento extra a los diez clásicos, y que al ser instituido por Cristo en la secuela del viejo testamento, lo vuelve muy importante a seguir. Y para no no entrar en errores, mejor cito al señor:
"Este es mí mandamiento: que os améis unos a otros como yo os he amado."
Tal como viene en el bestseller Jesus versión. Sorprendente, lo se.
Comprenderán mi incapacidad para reconciliar esto que escuchaba con la realidad.
Está pieza es una reflexión de mis emociones encontradas hacia el discurso del amor católico así como de mis frustraciones y mi relación con esta fe. Y la verdad es que me ayudó bastante a procesar todo ello y dejarlo ir.
Porque el problema no es realmente el viejito vengativo, ni su hijo hippie ni mucho menos la palomita buena onda, sino la quimerarica institución que pretende hablar por ellos, y que se niega a ver el daño que causa con tal de mantener un sentido de control y orden sobre algo tan caótico como lo es esta vida.
Durante bastante tiempo rechacé y renegué de todo lo que fuera religión, y en la actualidad no me considero para nada religioso pero pienso que Jesús tenía el tea, sus fans habrán malinterpretado la letra, pero no los odio por tener pésima comprensión lectora (o sentido común, o empatía, o auto consciencia, o autocrítica, o una conexión sólida con la realidad, o humanidad…).
Lo que quiero decir es que eligió creer que Jesús era un punk del amor y estoy en paz con ello.
Levanten la mano si alguna vez se han sentido personalmente victimizados por la Iglesia Católica… digo, Regina George.
-Sebs
Me encantó, exactamente Jorge ceo blogs, muerte a las escuelas cristianas asies